Qué podría decir yo de la casa La Mer que no se sepa ya? El gran descubrimiento de su creador hizo que se lograra una caldo base tan nutritivo y reparador que dio lugar a una de las cremas más famosas del mundo. Y más caras también, por supuesto.
Me hice con su bálsamo labial La Mer en un arrebato porque me costó… 60 euros… qué barbaridad! Hoy lo pienso y me escandalizo de mi misma aunque una vez que lo pruebas….te parece hasta barato! También es cierto que lo compré hace cinco años… y aún me dura!! Y sigue en un perfecto estado de conservación… así que, a ver si no está amortizado! Es cierto que los resultados son espectaculares y lo que os voy a contar os encantará:
- Presentación: el producto viene en un tarrito redondo. Para mí es poco práctico, no me suelen gustar los productos en los que hay que estar metiendo los deditos pero es cierto que este se mantiene muy bien. Otra pega es que aunque cierra muy bien luego cuesta de abrir.
- Aroma: como a medicamento, muy suave, mentolado.
- Usos: se puede utilizar en zonas agrietadas, codos, rodillas, cutículas, nariz irritada… y labios claro!
- Textura: muy untuosa, es transparente, no deja brillo pero sí se nota que te lo has puesto. Vale la pena poner una capa generosa. No deja sensación aceitosa ni pringosa pero sí es un poco pegajoso al principio.
Mi opinión de este bálsamo La Mer
Llevo más de quince días con los labios resecos, doloridos, llenos de pieles muertas, abiertos y agrietados, probe vaselina, las mascarillas de la cara, gloss y barras super hidratantes, letibalm, de todo, y el resultado nada de nada.
Sin pensármelo y como digo, desesperada porque no se me aliviaban, decidí que por invertir no me iba a pasar nada más grave que el hecho de perder el dinero como con los otros, así que me lo compré. Me fui derecha a una perfumería a por este bálsamo La Mer, y lo que me cobraron tampoco me pareció mucho teniendo en cuenta la marca, yo pagué 47 euros, y por el momento es el dinero mejor gastado de mi vida (lastima que no me dieran ninguna muestra de la crema…)
A lo que voy, nada mas usarlo el dolor desapareció de forma instantánea y comencé a sentir frescor y tiene una especie de ligero perfume, pero poca cosa…., a la hora las pieles muertas se habían reblandecido, a las dos horas mis labios estaban completamente lisos, ni una sola piel muerta, algo alucinante.
Lo único que noto es que la piel esta muy sensible, como si fuera nueva, así que me acabo de echar otro poquito y siento una especie de cosquilleo muy agradable.
Antes de acostarme me puse una capa generosa, al levantarme me llevé una sorpresa increíble: se me habían cerrado todas y cada una de las heridas y cortadas que cubrían la totalidad de mis labios. ¡¡¡¡No me lo podía creer!!!!
Seguían hinchados y todavía fastidiadillos, pero nada que ver con lo del día y los meses anteriores. Me había cerrado las heridas EN HORAS…
No me lo puedo creer, pero es que después de tantos días es un alivio para mis pobres labios.
Después de eso, ya es uno de mis imprescindibles. Sé que no es barato, pero se amortiza. Es lo mejorcito que he probado, tanto por eficacia, como por duración y conservación. El hecho de que venga en tarrito, en principio me frenaba, pero ahora mismo, es algo que me da igual. Es confortable de llevar, y tiene una sabor ligeramente mentolado y dulzón muy agradable. No soy de sabores mentolados precisamente, pero es un efecto que no dura prácticamente nada.
También lo utilizo en forma de cura si tengo algún evento o una boda, durante una semana y se gana volumen y firmeza en los labios.
El bálsamo labial La Mer vale realmente la pena. Volveré a repetir compra desde que se me termine. Seguro.
Ingeniero de Telecomunicaciones y probador incansable de productos, trato de descubrir lo bueno y lo malo de cada cosa que pruebo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia con el producto en cuestión, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos.