Pendrive Emtec
Probamos los mejores pendrive de Emtec. Si buscas una memoria USB barata o con formas de animales y originales para regalar, no te pierdas nuestros análisis
Una memoria USB es equiparable a un disco duro externo, solo que de un tamaño muchísimo más reducido. Tamaños, hay muchísimos. Las primeras que aparecieron eran bastante grandotas, siempre se suele tender a ir encogiéndolas, pero eran igualmente efectivas como las de ahora. Las más grandes miden a lo mucho 6cm, quizá alguno más pero es poco frecuente, de manera que se pueden llevar hasta en el bolsillo de la camisa o del pantalón.
La utilidad principal es almacenar datos. Se trata de una memoria no volátil, es decir, que guarda los datos aunque la desconectes del ordenador. Además no precisa de pilas. Se enciende automáticamente cuando la conectas al ordenador ya que se alimenta mediante USB, y una vez la desconectas no necesita ninguna pila para mantener dicha información.
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Capacidades, hay muchísimas. Las más pequeñas que aparecieron, o por lo menos que yo he visto, eran de 128MB, no descarto que hubiesen de 64MB pero eran tan poco habituales y tan caras que no se empleaban. Ahora están comenzando a aparecer en el mercado las de 1TB aunque es muy extraño verlas y la capacidad más extendida por su relación calidad precio suele ser la de 32GB o 64GB.
Como bien he dicho antes, me he encontrado con muchísimos casos de personas que pierden datos por no saber utilizar bien la memoria, esta y cualquiera, esto es algo estándar para todas las memorias de este estilo. O bueno, ya no solo el hecho por las pérdidas de datos, si no que no tienen ni idea de cómo funciona, y les da miedo comprarse una porque no están convencidos de saberlas utilizar, por ello creo este apartado.
Lo principal es mirar el sistema operativo que tenemos, por lo que he mencionado antes. Los sistemas operativos muy antiguos no lo van a reconocer. En principio ninguna memoria USB, salvo las más antiguas, debe presentar ningún tipo de conflicto en sistemas operativos como Linux o macOS, siempre y cuando siga las mismas pautas que en Windows, es decir, que no sean versiones excesivamente antiguas.
Una vez controlado ese pequeño asunto, procederemos a conectar la memoria al puerto USB, ya sea delantero, trasero, lateral… Colgaré una foto del puerto para que se tenga bien claro qué puerto es.
Automáticamente el sistema operativo lo reconocerá. En Windows si vamos a Mi PC veremos que nos ha aparecido otra unidad, como si fuese otro disco duro. Dentro de él podemos crear carpetas o simplemente ponerlo todo «a pelo», arrastrando todo tipo de datos: películas, música, fotos, documentos varios… Lo que sea. Lo importante es que no supere la capacidad del producto, porque entonces no cabrá y te saltará un mensaje diciendo que la unidad está llena. En MacOs funciona exactamente igual. Y en el caso de Linux, por lo menos en Debian, en el mismo escritorio te sale la unidad de la memoria USB, le asigna una letra y ya está listo para usar.
Lo más conflictivo es a la hora de sacar el dispositivo. Hay dos opciones en Windows que te da a elegir entre sacar el dispositivo de «forma segura», esto es que aparece al lado del reloj del escritorio una flechita donde haces clic encima y le dices «desconectar de forma segura» y entonces lo desconecta y ya puedes retirarlo, o si lo está utilizando te dice que todavía no está listo. Muchas personas piensan que por el hecho de cerrar la ventana ya ha desconectado el dispositivo, pero no es el caso. Si se quita de golpe, aunque veáis que no está haciendo lucecitas ni está traspasando nada, puede dejar corruptos los archivos y dejarlos completamente inutilizables, siendo necesario borrarlos, o en ocasiones muy extremas formatear el dispotivo. Físicamente por algo así, no se va a romper, eso está claro. Luego hay otra opción en Windows que sirve para que lo saques cuando te de la gana sin necesidad de extraerlo de forma segura, es un método muchísimo más rápido, pero corrompe los archivos igual que si la sacas a pelo de la otra manera, y es poco recomendable, por ello prácticamente nadie la emplea. En caso de MacOs y Linux también es muy necesario extraer la unidad de forma segura por el mismo motivo.
Hay otros elementos, a parte de un mal uso, que pueden hacer que una memoria falle, por ejemplo campos magnéticos de alta intensidad o situaciones extremas de temperatura, pero hablamos de cosas muy extremas, por ejemplo que haga menos de 20ºC o más de 80, lo segundo es más probable, y eso lo digo por personas que lo dejan en la guantera del coche, y ahí se alcanza rápido esa temperatura, sobretodo en sitios como Andalucía en pleno sol a las 4 de la tarde.
Una de las principales ventajas de este aparatito es su tamaño. Pues a penas ocupa ni pesa nada por lo que podemos guardarlo fácilmente en cualquier lugar y llevarlo con nosotros en cualquier bolsillo.
Otra de las ventajas reside en que no necesita pilas ni batería. Aunque antiguamente, los primeros USB que vieron la luz si que necesitaban una batería, los USB actuales no la necesitan pues se alimentan directamente del ordenador.
Claramente un punto a favor es la facilidad de su uso. No hace falta un Cd de instalación ni nada, sino que cualquier ordenador hoy en día reconoce en pen en unos instantes y lo instala automáticamente sin darnos tiempo casi a pestañear y permitiéndonos su uso con mucha facilidad.
Existen dos clases bien diferenciadas de memorias, están las SLC y las MLC, el sistema de cada una de ellas es distinto, pero sin embargo la rapidez no, con la primera obtenemos una velocidad de casi el doble, ya que guarda la información de forma independiente, y en el sistema MLC lo hace de forma conjunta, de dos en dos.
SLC , mayor duración y rapidez, aunque tiene un tamaño mayor, pueden soportar hasta 100.000 escrituras, MLC más capacidad en menos espacio, pero a cambio tienen menor tiempo de vida y rapidez de grabación y borrado, pueden soportar hasta 10.000 escrituras.
La diferencia entre una buena memoria y una normalita es lógicamente el precio, y parece fuerte decir esto, pero es cierto, ya que no existe una norma explícita respecto a esto, cada fabricante tiene un amplio margen para su realización
La diferencia entre una memoria USB flash buena y normalita es el controlador que incorpora, y como no está controlado por nada, pueden poner el que mejor deseen, siendo casi siempre el más económico, eso hace rebajar en bastante el valor del producto y por lógica su uso real.
Otro aspecto muy importante a valorar es la velocidad de lectura y escritura, especialmente si el pendrive es de mucha capacidad (más de 32GB), se recomienda que estos valores sean lo más altos posibles para que los tiempos de transferencia sean bajos y el tiempo que tarda en abrirse los ficheros también.
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