Tengo un problema con las ratas. Ellas me odian y yo las detesto.
Vivo en una casa con huerto. No contentas con darse un atracón gracias a las variadas y bien cuidadas hortalizas que mi padre cultiva, encima las muy descaradas se me metían por el sótano, por la cocina. Incluso encontré una debajo la cama.
Los métodos tradicionales, trampas con queso, pegamentos, o a estacazo limpio, no resultaron muy eficaces que digamos, así que después de escuchar unos cuantos consejos vuestros, pues decidí probar un método drástico que acabase para siempre con la plaga de roedores que se había instalado cómodamente en la casa.
¿Qué necesitas saber?
Compo raticida
Este Compo raticida lo encontré fácilmente en el Carrefour. Pienso que es demasiado sencillo de comprar, ya que se trata de un producto altamente venenoso y muy peligroso.
En las instrucciones lo advierte, pero creo que debería ser más visible y más explícito, porque la letra pequeña es muy importante.
Además estaba puesto en las estanterías a media altura, donde cualquier niño suelto, lo puede coger, se abre sin demasiadas complicaciones, y ya no quiero ni seguir imaginando lo que puede pasar.
En ese sentido mi SUSPENSO al Carrefour.
Lleva como protección contra un consumo humano accidental, una sustancia amarga. Buena la intención, pero aún así hay que tener mucho cuidado con los niños.
La cajita con un simpático dibujo de una rata asquerosa comiendo un montoncito de semillas azules y como diciendo «mmm, que ricas !!», muy atrayente, sí.
Son 250 gramos y cuesta menos de 3,50 euros.
Cojo un paquete y espero que sea tan efectivo como prometen.
Preparando las trampas para ratas
Son semillas de verdad, de avena y centeno, que son muy atractivas para los ratones, pero que están impregnadas del veneno. Una sustancia azulada que tiene un efecto mortal.
Viene con un dosificador muy práctico, que se encaja en el paquete y así no tenemos que tocar nada con las manos, muy de agradecer ese detalle.
Se ponen unos cuantos montoncitos de semillas en los lugares de paso, cerca de paredes, desagües, bajo tuberías, o donde haya cagarrutas o simplemente donde hayamos visto pasar a alguna rata. Seguro que pronto lo descubren.
La única precaución que hay que tener es poner las bolas en un lugar a la que no tengan acceso otros animales, en mi caso como tengo dos perros, siempre las pongo lejos del hocico de ellos, sino se las comerían y les haría daño.
Yo puse tres montoncitos, y cerré el garage con llave a cal y canto. Al cabo del tiempo se nota perfectamente como las han ido comiendo.
¿Funcionan estos raticidas?
En la ronda de la mañana siguiente, «mis ratones» se habían comido todos los cebos que puse, como buenos chicos, jeje, así que les volví a preparar unos nuevos montoncitos para que no pasasen hambre.
Al otro día, nuevamente todo comido. Bueno, pues a preparar otra ración.
Así, fueron pasando los días, y a cada mañana no encontraba ni rastro de las semillas. Sólo unas cuantas cagarrutas de ratón alrededor del sitio donde había puesto el veneno.
Seguí poniendo y ya casi iba a terminar el paquete.
Al quinto día empecé a mosquearme un poco. Y si a lo mejor los ratones se estaban poniendo las botas con comida gratis y esto no hacía efecto ??, y se estarían cachondeando en sus madrigueras, esperando a que el humano tonto les pusiese la siguiente ronda.??
Fui a la tienda donde compro el pienso para las gallinas para buscar otra cosa, y preguntando al hombre, me dio otra caja que dijo era lo mejor. Unos cuadraditos rojos como unas piruletas envueltas en un papel.
Puse una piruleta, junto a un nuevo montoncito de semillas, y esperé. Pero a la mañana siguiente todo apareció intacto. El Compo raticida había actuado ya. No hizo falta más.
Sí que es efectivo, aunque tarde unos días, acaba con ellas.
El efecto una vez que se empiezan a comer las semilas envenenadas, es muy eficaz. La materia esa azulada impide la coagulación de la sangre. En la etiqueta nos aseguran de que las ratas mueren sin dolor en unos días en su propio nido, pero la práctica es un poco diferente.
Las ratas se comen eso, y su sangre se vuelve más líquida. No es capaz de transportar tanto oxígeno, y el corazón tiene que trabajar a ritmos forzados.
Al final el animal se desangra por dentro, sus pulmones se llenan de plasma y no puede respirar.
Las hemorragias internas se extienden por todo el cuerpo hasta que empieza a sangrar por la nariz, boca, ojos y todo lo que tenga salida al exterior.
La rata puede moverse, hasta que las lesiones internas se agravan y se acaba muriendo desangrada y asfixiada donde puede llegar.
Muy agradable no debe de ser, desde luego, por mucho que lo aseguren en la etiqueta.
Una vez eliminada la plaga hay que destruir todos los restos de veneno, y buscar los cadáveres de las ratas para quemarlos.
Al siguiente día dando una vuelta por la parcela donde están las gallinas, vi una rata muerta debajo de unas tablas.
El cadaver estaba ya descomponiéndose, o sea que llevaba ya unos días allí. Me dio bastante asco verlo lleno de hormigas y de gusanos comiéndoselo. Cuidado con esto.
Imaginaos ahora la tarea de empezar a revolver todas las cajas del garage en busca de ratas muertas desangradas.
Desde entonces no han aparecido mas ratas, como si desapareciesen. Dejar el veneno por los rincones fue un éxito total.
Ingeniero de Telecomunicaciones y probador incansable de productos, trato de descubrir lo bueno y lo malo de cada cosa que pruebo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia con el producto en cuestión, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos.