Tras probar la pulsera Polar Loop, hemos podido trastear con su competidora más directa: la reciente Garmin VivoFit. Las dos son pulseras que registran nuestra actividad diaria y se sincronizan con nuestro iPhone, iPad y servicios online, sin embargo, son muchas las diferencias entre ambos modelos.
En este post nos vamos a centrar en hacer un análisis exhaustivo de la Garmin VivoFit y en otro haremos una comparación más exhaustiva entre los dos modelos.
¿Qué necesitas saber?
Garmin VivoFit sabe en todo momento lo que haces
Como pulsera de actividad que es, la Garmin VivoFit es capaz de saber en todo momento lo que hacemos, realizando un registro continuo de nuestra actividad, pasos, calorías consumidas, calidad del sueño y frecuencia cardiaca si contamos con un pulsómetro compatible con la tecnología Ant+.
El diseño de la pulsera Garmin VivoFit es sobrio y sencillo, apostando por una pulsera de goma que está disponible en diferentes colores y tamaños, viniendo de serie una pulsera para muñecas pequeñas y otra para muñecas que tengan mayor contorno.
La unidad principal de la pulsera Garmin VivoFit se extrae con facilidad estirando ligeramente los extremos en los que está anclada con la pulsera, facilitando así el cambio a otra pulsera de diferente color o tamaño.
La pulsera cuenta con un único botón que ofrece dos modos de funcionamiento diferente:
- Pulsación corta: va alternando entre los diferentes modos de visualización: pasos, calorías, pulsaciones, hora, calendario, distancia recorrida y pasos restantes hasta llegar al mínimo diario
- Pulsación larga: habilita el modo nocturno para registrar la actividad mientras dormimos, la sincronización con nuestro iPhone o iPad o el emparejamiento con el pulsómetro.
El funcionamiento es francamente sencillo así que no tendremos ningún tipo de problemas al respecto.
La pantalla no está retroiluminada y es alfanumérica. Su contraste es magnífico para que podamos leerla sin problemas en todo tipo de condiciones de iluminación. En el centro aparecerá la información principal de los diferentes modos, abajo salen los iconos que se van iluminando para mostrar que modo está activo en ese momento y, por último, en la parte superior hay una barra de color rojo que se va rellenando para indicarnos que llevamos bastante tiempo inactivos y que tenemos que dar un paseo para activar nuestro cuerpo.
Garmin VivoFit, una autonomía envidiable frente a sus competidores
Al contrario que muchas pulseras que hay en el mercado que requieren una carga cada tres o cuatro días, la Garmin VivoFit goza de la ventaja de ofrecer hasta un año de autonomía, cifra que se alarga o se acorta sensiblemente dependiendo del número de sincronizaciones que hagamos a lo largo de cada día con nuestro Smartphone.
¿Cómo le dura tanto la batería a la Garmin VivoFit? El secreto está en su pantalla de consumo ridículo, con un funcionamiento similar a la de los clásicos relojes de Casio. La pulsera Polar Loop cuenta con una pantalla con matriz LED retroiluminada en color rojo y eso es muy llamativo pero también gasta mucha más batería, además, la VivoFit siempre está mostrando información mientras que la Polar Loop se apaga transcurridos unos segundos.
Cuando veamos que la autonomía escasea, nosotros mismos podemos sustituir las dos pilas CR1632 que quedan a la vista si extraemos los cuatro tornillos que sujetan una tapa de plástico en la unidad principal de la pulsera.
El único cuidado que tenemos que tener en la extracción de las pilas es el de evitar dañar la goma que convierte a la pulsera en estanca para sumergirla en profundidades de hasta 50 metros.
Usando la Garmin VivoFit como pulsómetro
Una de las funciones que ofrece la pantalla de la pulsera Garmin VivoFit es la demostrar nuestras pulsaciones, sin embargo, para poder hacer uso de esta función necesitaremos una banda para el pecho compatible con la tecnología Ant+. No valen las bandas con Smart Bluetooth o Bluetooth 4.0 así que tendremos que adquirir una con Ant+ que es otro protocolo muy extendido en el mundo deportivo y que la propia Garmin utiliza en otros dispositivos como GPS para ciclismo o relojes de running.
Si queremos ver la frecuencia cardiaca, tenemos que colocarnos la banda en el pecho, activar el registro del pulso en la pantalla HEART de la pulsera y, con una frecuencia de actualización de poco más de un segundo, irá apareciendo sobre la pantalla nuestras pulsaciones.
Aunque cambiemos a otra visualización como la hora o los pasos, el registro de pulsaciones continuará y un pequeño icono con un corazón nos servirá como indicador de que todo sigue funcionando correctamente.
Si queréis comprar el módulo del pulsómetro, yo os recomiendo la banda de mejor calidad de la propia Garmin ya que es de tela elástica, además, el transmisor Ant+ es de reducidas dimensiones y se puede extraer con facilidad mediante un par de corchetes. Esto hace que sea mucho más cómodo de llevar puesto durante un uso prolongado, algo que reduce considerablemente las rozaduras que producen otras bandas de peor calidad o más aparatosas.
Puedes comprar la Banda Garmin Ant+ con un descuento interesante en su precio original a través de Amazon. También puedes comprar un pack formado por la pulsera Garmin VivoFit y una banda pulsómetro aunque en este caso, la banda es de inferior calidad aunque el precio final también es más reducido en compensación.
La aplicación Garmin Connect para iOS
Garmin tiene una comunidad online fantástica llamada Garmin Connect. Ahí podemos llevar un seguimiento de nuestros entrenamientos y de los datos recopilados por la pulsera Garmin VivoFit. Por supuesto, también podemos motivarnos con retos o visitando los perfiles de otros usuarios como si de una red social se tratase.
Como no podía ser de otra forma, hay una aplicación gratuita de Garmin Connect para iOS que nos permite sincronizar en tiempo real la pulsera VivoFit utilizando el Bluetooth del iPhone o iPad. Transcurridos unos segundos, podremos obtener datos de nuestra actividad diaria, semanal o mensual en la que aparecerán los pasos, calorías, distancia recorrida y gráficas para que todo sea mucho más visual.
También hay un apartado para ver la calidad del sueño, pudiendo ver el tiempo que hemos pasado durmiendo y el nivel de actividad que tenemos por la noche. Hay que acordarse de poner la pulsera en modo SLEEP (pulsación larga del botón durante unos segundos) para que se controle con precisión los periodos de movimiento mientras dormimos, de lo contrario, no recopilaremos datos para el dibujo de la gráfica.
Conclusiones, disponibilidad y precio
La pulsera Garmin VivoFit es un accesorio fantástico para mantener unos hábitos de duda saludable. Aunque ya hay muchas pulseras en el mercado, la propuesta de Garmin nos ha gustado porque nos olvidamos por completo de la batería, pudiendo estar casi un año sin necesidad de quitarla de nuestra muñeca.
Otra ventaja es que las pilas las podemos cambiar nosotros mismos mientras que en el caso de la Polar Loop, cuando la batería pierda su capacidad, tendremos que tirar la pulsera a la basura.
Otra cosa que nos gusta mucho es que la correa se pueda sustituir y es que en una gran cantidad de casos son muchos los deportistas que utilizarán este producto. Ya sabéis que el sudor termina dañando las pulseras de goma y el echo de poder cambiarla es un punto a favor.
Por último, su precio de poco más de 100 euros es otra baza más para dar el salto y adquirir este dispositivo wearable que tan de moda está últimamente.
Comprar – Garmin VivoFit
Ingeniero de Telecomunicaciones y probador incansable de productos, trato de descubrir lo bueno y lo malo de cada cosa que pruebo. Los textos que encontrarás en esta web han sido escritos por muchas personas contando su experiencia con el producto en cuestión, la web no se responsabiliza de la exactitud, lo actualizado que está su contenido y las opiniones vertidas en los textos.